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Asesinato de Macarena Valdés: ¿qué sabemos de su muerte dos años después?

Era 22 de agosto de 2016 cuando un niño de once años abrió la puerta de su casa y encontró lo impensado: su madre muerta, colgando del techo. La mujer estaba acompañada de su otro hijo de tan sólo un año. Cuatro niños en total quedaron sin madre tras el supuesto suicidio de la activista medioambiental de 31 años, Macarena Valdés.

La familia quedó incrédula ante el informe de Carabineros y el Servicio Médico Legal que aseguraban la tesis de suicidio. Juntó dinero para una segunda revisión y finalmente se realizó la exhumación de Macarena Valdés en septiembre.

Los resultados de la autopsia fueron categóricos: la vértebra cervical de Macarena no se rompió jamás, por ende, Macarena Valdés no se suicidó.

A Macarena Valdés la mataron

Según Luis Ravanal, médico forense particular, sí se trata de un asesinato. Macarena ya estaba muerta cuando fue colgada de las vigas de su casa, en Liñique.

“La autopsia no presentó ningún signo de hemorragia, por lo tanto no es posible demostrar un ahorcamiento en vida”, señaló Ravanal, al medio Publimetro. El forense además sentenció que el caso de Valdés se trata de “un cadáver que se suspendió siendo un cadáver”.

La activista de la comunidad mapuche Newen de Tranguil, se encontraba en una disputa con el proyecto hidroeléctrico de la empresa RP Global y Saesa, que construía la Central de paso Tranguil.

Macarena trabajó para detener un proyecto hidroeléctrico y terminó siendo asesinada. Su muerte podría ser tipificada como violencia de género si el proyecto de la Ley Gabriela llegara a concretarse en el congreso.

RP Global y Saesa

La empresa se instaló en el lugar con diversas irregularidades, entre ellas la destrucción de un cementerio. También el incumplimiento del convenio 169 de la OIT (que obliga realizar consulta indígena para aprobar cualquier instalación invasiva) y el incumplimiento  del estudio de impacto ambiental que debe exigir el Servicio de Evaluación Ambiental.

Además de todas las irregularidades, la que más afectaba a los habitantes del sector que se construía sobre la vivienda de Mónica Painemilla.

Un día antes del asesinato pertenecientes a Saesa le hicieron una advertencia a Painemilla. “Si no se van, algo muy malo les va a pasar”, amenazaron.

Un día después de la muerte RP Global instalaba cables de alta tensión en el sector que la comunidad defendía. La empresa declaró no saber que en el recinto se estaba realizando esta ceremonia y detuvo sus faenas.

Ese mismo día Painemilla intentó denunciar a la empresa a través de la PDI, que no tomó el caso porque ella “no era familiar de Macarena”, como indicó Pinemilla al medio El Desconcierto.

Una familia que busca justicia

A pesar de todo la ceremonia continuó y al son del Kultrún, la Trutruca y el Ayecán. Con esa energía más de 300 personas despidieron de este mundo a Macarena Valdés.

El funeral realizado en el cementerio mapuche en Río Hueico. Ahí los habitantes estaban acompañados de una profunda impotencia, sobre todo por lo que vendría después.

La familia no estaba conforme con el informe que entregó Carabineros y el SML. Por ello comenzó una campaña para juntar dinero y realizar una nueva autopsia.

Su cuerpo fue exhumado el 25 de septiembre del año pasado y un largo trayecto tuvo que recorrer para llegar a la sala del peritaje.

Supuestamente el cuerpo llegaría desde la región de Los Lagos al SML de Santiago para ser revisado el 3 de octubre.

Autopsia

Se citó a Rubén Collío a las 10:00. Sólo una hora más tarde pudo hablar con el fiscal, que le avisó que la autopsia se había cancelado. Otra cosa que no se notificó fue que el perito de la familia, Luis Ranaval, debía estar presente.

A Ranaval no lo querían dejar participar del proceso. Desde un principio la fiscal a cargo, Alejandra Anabalón Zunino, se negó. Así toda posibilidad de que el perito hiciera algo más que observar se acabó.

“La situación fue atípica porque las partes pueden presentar a sus propios peritos. Que se nieguen  aceptar una segunda opinión no tiene ninguna justificación”, dijo a Publimetro Luis Ravanal.

Sin embargo, y a sorpresa de todos la perito oficial, cercana a Carabineros y participante de controvertidos casos como el de Martín Larraín, Vivian Bustos Baquerizo, cedió su puesto de participante para dar tranquilidad a la familia.

“No sé cual es su rol (el de Bustos) porque no participa finalmente de la autopsia”, indicó el perito.

El cuerpo de Macarena recién pudo ser examinado el 30 de octubre y luego de la análisis al cuerpo que llevaba un año, dos meses y ocho días a la espera, la tesis de suicidio quedó por el suelo.

“Ahora tenemos la posibilidad científica de demostrar a Macarena la asesinaron. A la negra la mataron, después la colgaron y ahora tenemos como demostrarlo”, dijo en un video su pareja y padre de sus hijos e ingeniero ambiental, Rubén Collío.

A dos años de su muerte, más de 500 personas exigieron justicia para Macarena Valdés en Santiago con una emotiva marcha.

 

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