Ya intentaron desalojar la toma de El Melón una vez, pero no lo lograron. Ya van más de tres meses desde aquel día en que un grupo de pobladores se tomó el Pozo 9 de la empresa Anglo American. Y a pesar de las presiones tanto del municipio como de la policía, la comunidad sigue en la ocupación.
En esta línea durante la mañana uniformados de la Séptima Comisaría de Calera llegaron hasta la toma. Ahí, en Villa Disputada y cerca de las 7:00, efectivos policiales comenzaron su operación.
Con algo que sería un “control de identidad” tomaron presos a ocho miembros de la toma. A pesar de que un procedimiento de este tipo debe realizarse en el mismo lugar, Carabineros se llevó a los jóvenes a la Comisaría de La Calera. Así lo confirman los detenidos a Tomate Rojo.
Después de tenerlos tres horas esperando por respuestas, finalmente fueron liberados. Los jóvenes quedaron con multa bajo los cargos de “usurpación no violenta”. Carabineros no les comunicó los cargos al momento de la detención.
“Condenamos tajantemente las acciones de Anglo American”, expresaron desde la toma a través de un comunicado. A la vez que acusaron a la empresa de negar cualquier tipo de diálogo con la comunidad. “Hoy nos responden dejando caer todo su poder sobre nosotros. También condenamos el actuar de la Municipalidad, quienes se disponen al servicio de la empresa”, comunicaron.
La historia de lucha de El Melón
Ya son tres meses desde que comenzó la toma, impulsada por el estallido social. Pero a pesar de que lo ocurrido el 18 de octubre le dio la fuerza a los pobladores para realizar la radical acción, motivos tenían hace años. “Había días completos en que el agua estaba cortada y cuando llegaba era con poca presión. Meses bañándonos con tarros y tomando agua embotellada porque las condiciones sanitarias son terribles”, dijo a Radio La Clave Karen White, vocera de la Mesa Ciudadana El Melón y militante del Movimiento de Pobladores Ukamau.
De la misma forma Andrés Marín se fue en picada contra Angloamerican. El también vocero culpó a la empresa de que “van a secar al pueblo y lo van a matar”. Además alegó que la situación provoca “naturalizar la sequía”.