Ubicada en la comuna de La Florida, el bosque Panul es considerado el “pulmón verde” de Santiago. Posee una gran extensión –cerca de 1000 hectáreas- y alberga flora y fauna con algún grado de conservación. Sin embargo, distintas empresas inmobiliarias han amenazado su seguridad desde su privatización en dictadura. Annie Luypaert, activista territorial, ha emprendido una serie de actividades críticas en contra de esas empresas.
La apropiación de los Navarrete
Vicente Navarrete Marinot recibió el Fundo Panul en 1978 por parte de Augusto Pinochet, su amigo cercano, luego de que este se lo vendiera por una asequible cifra monetaria. En la actualidad, el Fundo está en manos de los hijos de Vicente, Javier y Vicente Navarrete Rolando.
El primogénito, Vicente Navarrete, forma parte del directorio de la controvertida empresa Oxiquim. La compañía fue acusada de ser una de las responsables de la grave situación de contaminación que se vive en Quintero y Puchuncaví.
La importancia del conflicto
Diversas organizaciones territoriales se han manifestado en protección del bosque, como la Red por la Defensa de la Precordillera. Surgida en el año 2006, la Red se ha propuesto hacer de El Panul un parque público. Ha impulsado una extensa difusión comunicacional para dar a conocer las problemáticas que cubren al bosque.
La lucha entre las empresas y la comunidad llevarían al Panul a convertirse en otro conflicto socioambiental que afecta a la RM. Se suma al bullado caso de Alto Maipo, entre otras problemáticas de la región.
El trabajo organizado de la comunidad en el sector del Panul es similar a lo que realizan los habitantes de San Fabián para preservar el Río Ñuble o al trabajo de defensa que se lleva a cabo en la Patagonia para detener el avance de las mineras.
Annie Luypaert ha participado en la Red desde sus inicios y se ha levantado como una defensora de su territorio. Al igual que Annie, Macarena Valdés o Alejandro Castro fueron otros ejemplos de la lucha territorial.
En su labor como vocera de la Red por la Defensa de la Precordillera, ella se ha enfrentado a distintas autoridades públicas en representación de su agrupación para que el Estado se preocupe por el bosque. Annie habló a Tomate Rojo sobre la relevancia, los conflictos y el trabajo comunitario necesario para El Panul.
¿Cuál es la relevancia del bosque El Panul para la Región Metropolitana?
“El bosque El Panul es un bosque esclerófilo. Hicimos un seminario donde varios científicos declararon la suma importancia de los bosques esclerófilos para la región Metropolitana.
Punto uno: la hoja dura de los arboles esclerófilos permite que no se pierdan en invierno, precisamente el momento cuando está más álgido la contaminación en Santiago.
Punto dos: estos árboles tienen unas raíces muy profundas y el agua que ellas absorben se va en la napa subterránea y sube a todo el resto de la región metropolitana. Por ejemplo, los árboles del parque Forestal o del parque O’Higgins siguen vivos gracias a los que están en la precordillera, esencialmente.
Otra gran ventaja del bosque El Panul es que si eventualmente hubiera un aluvión, el bosque contendría el material que vendría de la cordillera para abajo.
El bosque tiene también un tremendo valor recreacional para la gente que va en ese momento, pasar allí el fin de semana o en la semana, hacer trekking, etc. Y también tiene un tremendo valor espiritual porque mucha gente puede ir allá a recogerse, a meditar. Y es una fuente de inspiración para artistas, también para la gente con inspiración religiosa. Hay una machi que está ahí todos los fines de semana.
Por último el bosque Panul tiene en si un tremendo valor porque está muy cerca de la ciudad. Cualquiera que viniera de La Florida en 20 minutos o media hora puede llegar ahí sin tomar locomoción. Hay que pensar que mucha gente que vive en La Florida o más allá, en otras comunas, no tienen dinero para viajar a la playa el fin de semana o ni siquiera al Cajón del Maipo. Al bosque El Panul puedes llegar inmediatamente”.
¿Qué conflictos ha enfrentado el bosque desde que se privatizo en dictadura?
“En dictadura, Pinochet se lo regaló prácticamente a Vicente Navarrete. Dice que fue por una licitación, pero 580 hectáreas en tres millones es irrisorio obviamente.
Pero no hubo mayor problema ambiental porque los vecinos no nos dimos mucho cuenta. Salvo que en el año 2000 habían tratado de darle al dueño un fundo más al norte de Santiago. Él usaba el bosque para sacar algas. Entonces se había propuesto hacer un cambio de regalar el bosque a la comunidad y el Estado le iba a regalar un fundo más arriba.
Vicente Navarrete (padre), el dueño antiguo, estaba dispuesto a hacerlo eventualmente. Pero sus hijos no porque vieron como venía la cosa y la plata que se podía ganar por construir allá casas de 3000-4000 UF. Entonces la verdadera pelea empezó cuando se supo que iban a presentar un anteproyecto para 1300 casas. Efectivamente lo presentaron, pero después nosotros pudimos echarlo abajo en el Servicio de Evaluación Ambiental”.
¿Cuál es la problemática que atañe a El Panul en la actualidad?
“Bueno, en este momento el problema es que nosotros no sabemos qué va a pasar exactamente con él. No sabemos cuáles son las verdaderas intenciones, ni del dueño, ni del gobierno regional, ni del gobierno municipal, porque el municipio tuvo la oportunidad de hacer una modificación que podría haber cambiado el uso del suelo y del bosque El Panul en área verde y no lo hizo.
En enero de 2015 Carter (alcalde de La Florida), hizo aprobar una modificación que permitió en ese momento la subdivisión del bosque en parcelas de 10 mil metros. En cada 10 mil metros se puede hacer una construcción de 140 metros. Pero nosotros decimos, bueno, si legalmente se puede construir, el dueño podría decir, ya, yo lo hago. Entonces nosotros no sabemos bien que podría pasar.
Hemos pedido tanto en el primer gobierno como en el segundo gobierno de Bachelet que se expropiara el bosque. Legalmente se puede hacer declarándola área verde porque ahí se disminuiría mucho el valor de venta. Pero políticamente no hay ninguna intención ni un interés en hacerlo”.
¿El actual gobierno de Piñera tampoco ha mostrado interés en comprar el bosque?
“Nosotros tuvimos una entrevista con la Intendenta en la primera semana que asumió y nos mandó a una entrevista con el jefe de gabinete y nosotros le dijimos que no. Pero vamos a volver a insistir con el gobierno actual, con la Intendenta, porque son el gobierno regional o el gobierno municipal quienes pueden cambiar el uso de suelo“.
Trabajo comunitario
Dos de las principales demandas de la Red por la Defensa de la Precordillera es que el Estado expropie el fundo Panul y hacer del bosque un parque público. Esta segunda exigencia la han estado llevando a cabo los mismos miembros de la Red.
Educación ambiental sobre el bosque, seminarios y acción comunicacional son solo algunas de las medidas que ha impulsado la organización. A continuación Annie Luypaert expone distintas tareas que se han propuesto en defensa del Panul.
¿Qué soluciones ha planteado la comunidad activista para resguardar la seguridad del bosque?
“Hace varios años hemos trabajado en el bosque con los pocos medios que tenemos. Hemos hecho manifestaciones precisamente para marcar presencia. Hemos puesto señaléticas, hemos delineado caminos porque ahí hay un uso peatonal y de bicicletas. Es súper peligroso porque se tiran de repente por los caminos que son peatonales. Se pueden tirar para abajo con mucha velocidad y pueden atropellar a los niños.
Nosotros estamos tratando de hacer ese tipo de cosas. Ahora últimamente hemos puesto una reja con un portón gigante. La idea es cerrar el bosque en la noche, precisamente para evitar algo muy grave que es la gente que hace fogatas, que dejan la fogata prendida y que después causan incendios”.
¿Cómo uno puede participar para proteger al Panul?
“Hay varios grupos que están en este momento trabajando. Nosotros como Red tenemos varias comisiones de trabajo y cualquiera se puede integrar a esas comisiones. También hay un grupo que se llama Conciencia Panul que están haciendo señaléticas con material reciclado.
El día domingo está la machi, Rosario se llama, que hace ceremonias y también ella pide de repente ayuda porque ella hace ofrendas a la tierra.
Lo otro es difundir lo que están haciendo ustedes, que más gente conozca el bosque, que vayan y que lo cuiden cada uno como visitante. Por ejemplo, no llevando basura, botellas de plástico o envases de comida chatarra y dejarla arriba. Y lo otro, obviamente, algún apoyo económico para comprar materiales que necesitamos, las pinturas, las señaléticas y todo eso”.
Medios de contacto en ayuda del Panul
Sitio web Red por la Defensa de la Precordillera
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