Una grave denuncia realizó el Consejo Regional del Archipiélago de Chiloé del Colegio Médico Veterinario (Colmevet) y la ONG Chiloé Silvestre. Ambos advirtieron que la fauna silvestre de la zona está desprotegida, debido a la falta de fiscalización, la inexistencia de políticas articuladoras, recursos e infraestructura pertinente para enfrentar el tema. Al respecto, ejemplificaron que al año cerca de 40 pudúes, especie protegida y en peligro de extinción, muere producto de ataques de perros y atropellos.
“Como Colegio Médico Veterinario tenemos una gran preocupación por el cuidado de nuestra fauna, en el entendido que esta situación impactará en todo el ecosistema. Sabemos que se efectúan cientos de denuncias por fauna silvestre dañada en la provincia de Chiloé, pero ningún organismo del Estado hace eco a estos problemas”, sostuvo Alfredo Caro, presidente del Consejo Regional del Archipiélago de Chiloé de Colmevet.
“La autoridad deja el rescate de la fauna silvestre en manos de particulares, inexpertos y organizaciones sin fines de lucro que luchan por sobrevivir prácticamente sin ningún apoyo económico”, complementó Caro.
Desde Chiloé Silvestre detallaron la delicadeza del problema. El rescate de fauna silvestre, dicen, debe realizarse en manos de expertos. “Puede provocar serios daños a la persona que manipula un animal silvestre y puede agravar aún más las condiciones de la fauna silvestre herida producto de un mal manejo y transporte”, comentó el Dr. Javier Cabello, presidente de la entidad, única organización encargada de rehabilitar fauna silvestre en el archipiélago.
Desde el 2018 el número de pudúes ingresado a la ONG Chiloé Silvestre ha aumentado en un 25% cada año. En lo que va de 2020, 13 pudúes han sido ingresados al centro de rehabilitación. Sin embrago, estiman que esta cifra llegará a la veintena hacia el final del año.
Según detalló Ronie Asencio, médico veterinario a cargo del centro de rehabilitación, “esta cifra representará a penas la mitad de los pudúes que necesitan de una atención urgente. Muchos no llegan al Centro porque mueren en el mismo lugar sin atención oportuna”.
De los animales que llegan a tener atención, el 70 % ingresa producto del ataque de perros (todos con dueño), un 25% a causa de atropellos y un 5% por otras razones.
Chiloé: Rescate y desprotección
Según han constatado por las denuncias de particulares, existe una falta de recursos e infraestructura del SAG para enfrentar el rescate de animales. A esta deficiencia estructural se le suma los horarios de oficina, que no permiten respuestas oportunas.
Debido a la ineficacia del SAG, señalan desde la Red de Fauna Accidentada de Chiloé, han llegado a sumar más de 60 denuncias de fauna silvestre herida en los últimos meses.
Sergio Reinaldos, coordinador de la red que es articulada por la ONG Chiloé-Protegido, explica que han tenido que “coordinar con otras organizaciones y con el Colegio Médico Veterinario (Colmevet), el traslado de pacientes hasta el centro de rehabilitación, con vehículos propios y/o buena voluntad de la misma comunidad chilota”.
Desde la red indican que, en los sectores donde han existido más ataques de perros y atropellos, debieran tomarse medidas más eficientes de mitigación.
Al respecto, Alfredo Caro enfatizó en el impacto de los perros -sin una tenencia responsable- sobre la biodiversidad chilota. Esto, además del efecto en la pequeña agricultura. Y es que los cánidos matan a decenas de ovejas, acabando con parte de la producción de decenas de familias del archipiélago.
“Es muy importante que la población entienda este problema y tenga la información oportuna sobre el importante rol que tienen en una tenencia responsable de sus mascotas. En tanto, la autoridad debe avanzar en una mayor fiscalización del cumplimiento de la Ley de Tenencia Responsable de Mascotas y animales de compañía”, comentó Caro.
Además añadió que esperan retomar las conversaciones que tuvieron con el SAG a principios de año, que se vieron suspendidas por la pandemia. Su objetivo es coordinar labores para el rescate y protección de la fauna silvestre.
Cabe destacar que no solo pudúes ingresan a Chiloé Silvestre, si no también loros, huairavos, gaviotas, cisnes, pingüinos, lobos marinos, tiuques y otras especies de fauna silvestre nativa protegidas por leyes nacionales. A este respecto, hay aclarar que lobos marinos, pingüinos, tortugas, nutrias y cetáceos están protegidos por la Ley de Pesca y Acuicultura a cargo de Sernapesca, quienes realizan los rescates correspondientes derivando los animales al centro de rehabilitación sin restricción de horario.
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